21 DE DICIEMBRE DE 2009.
Bitácora de vuelo.
En el hemisferio norte las bajas temperaturas están marcando una navidad especialmente cruda. Por acá (hemisferio sur) estamos viviendo exactamente el otro lado de la moneda, un calor intenso como pocos.
Ambas realidades conviviendo al mismo tiempo.
Y no puede ser esto sino un reflejo de nuestra propia conciencia. Si la gente supiera que nuestra conciencia está profundamente ligada a la Tierra no se sorprendería en absoluto al observar esta convivencia simultánea de climas tan opuestos entre sí.
La verdad es que esa es nuestra realidad actualmente. Lo único que hace es reflejar nuestra propia conciencia.
Algunas personas llaman a esto polarización, pero esta palabra de alguna manera entraña conflicto y no me parece que sea eso lo que ocurre. Pondré un ejemplo:
Durante todo este año hemos señalado con mucha firmeza que no creemos en lo que nos han intentado vender como realidad. Llámese esto vacunas, alteraciones climáticas, trazas químicas, objetos extraños en el cielo, extraterrestres, etc. En este sentido, tanto la página de Project Camelot y la de David Icke en Inglés; y la de Rafael Palacios en Español, se han convertido en mis referentes favoritos. Desde aquí aprovecho para darles las gracias por su magnífica labor. Para algunos, hablar de cosas negativas sólo produce más negatividad, pero esto no es necesariamente así cuando el resultado de esa visión nos saca de la ignorancia y nos hace más libres. Más negativas son las noticias de televisión que imprimen imágenes y sensaciones de miedo en nuestro subconsciente a diario.
Y lo que ocurre como resultado de esta recién aprendida libertad es que deseamos construir un mundo nuevo. Donde las energías sean aprovechadas libremente, donde la salud sea recuperada y la educación nos convierta en seres generosos y estables.
Desclasificar por un lado lo oscuro y emprender un camino luminoso de construcción puede hacerse en paralelo. No es "lo uno o lo otro". Son las dos cosas al mismo tiempo. Conviven juntas y nos llevan a una nueva posición en el tiempo y el espacio.
La oscuridad ha actuado a plena luz del día y la luz ha debido esconderse en la oscuridad.
¿Pero saben qué está ocurriendo ahora? Que la Luz ha aprendido de la oscuridad y mientras está última se descuida, en plena noche, en medio de su propio terreno, la Luz siembra estrellas. No rechacemos nuestra parte oscura, está allí para llevarnos precisamente donde tenemos que ir. Nadie notaría si la Luz realizase sus obras a plena luz, hay que ser Luz en las sombras.
Allí se ve el verdadero alcance de un sembrador.
Como regalo de Navidad les dejo, aparte de un inmenso abrazo a todos los que leen este blog, una estatua que refleja lo que he expuesto, está en Kaunas, Lituania y se llama Sembrador de Estrellas.
De día, a plena luz, no se entiende su sentido.
Pero de noche...
MARIA ELENA SARMIENTO
DIRECTORA
EL CASTILLO DEL ALMA
21 12 2009
0 comentarios:
Publicar un comentario